A Dios rogando y en idealista buscando

Buscar una habitación en Madrid está siendo como si buscas una aguja en un pajar.

Los y las jóvenes de acogida encuentran grandes dificultades a la hora de querer independizarse de los pisos de emancipación. Es una problemática triangular basada en su condición de haber estado tutelados por la Comunidad de Madrid, por su procedencia extranjera y por la edad joven que tienen, entre 18 y 19.

Por otro lado, la inflación inmobiliaria empeora la situación, puesto que el coste de una habitación decente oscila entre 360 y 400 € mensuales llegando a costar un “ojo de la cara”.

La gota que colma el vaso es la desesperada demanda de la gente, hay personas que reciben diariamente hasta 20 interesadas e interesados en alquiler una habitación.

Una de las tácticas de los chicos y las chicas es alquilar pisos enteros y luego compartir las habitaciones. No obstante; las inmobiliarias prefieren alquilar los pisos a familias en vez de unos cuatro chavales de años. Como hemos mencionado anteriormente; varios factores dificultan el acceso a la vivienda, pero el más frecuente en las respuestas de los propietarios es “estamos buscando a alguien más cercano a nuestro rango de edad”.