Horuelo: Un lugar donde se encuentran los pueblos

Entre las diferentes culturas, idiomas, bagajes e historias de vida hay algo que al día de hoy sigue siendo el punto en común dentro de las diferentes mezclas.

 

¿La comida? 

¿La música?

 

Puede ser, pero ese domingo en la mezcla de miradas marroquíes, cameruneses, ecuatorianas y españolas, el gran punto en común fue una pelota que rebotando y deslizando entre los pies de los dos equipos terminaron por marcar un gol y despertar el compañerismo en todos.

 

¡Comienza el partido! 

 

Nada más empezar se escuchan quejas del jugador Lafkaihi del Real San Rosendo.

Un intruso llamado Yaya Koné del Bayern San Blas abraza al jugador-talento y no le deja avanzar para marcar. Acción cortada por el Pablo del Alavés: “Chicos aquí jugamos bien o Agur”.

 

Ayoub del Real San Rosendo no para de correr con el balón, reviviendo los míticos años de Maradona en Argentina y disfrutando de los pases precisos que le daba su compañero Rubén, también parte del Real SR.
En la puerta el atlético Said del equipo Atlas de plata, bloqueando los tiros más difíciles y dejándose escapar los más fáciles y finalmente Ibra, su compañero, que volando de un lado al otro del campo se olvidaba pasar el balón a los demás.
El equilibrio perfecto aportado por una jugadora que cada minuto decide cambiar de equipo, ¿su truco? Atacar con los que atacan.La pichichi se hace llamar Dayana .

 

En fin, entre los varios equipos no puede faltar la voz narradora que contando de las mejores acciones del Real San Rosendo, las mejores paradas de Atlas de Plata, las sorpresas del Bayern San Blas y el apoyo de FC Gandhi, esperemos haya metido algún gol.

¿Verdad Oussama?

 

Oussama: “Estimada periodista Miriam; he metido 7 goles”.